28 feb 2012

La esperanza del hombre

Hay muchas razones por las cuales mentimos, pretextos para ello nunca faltan, podemos tener muchos para justificar nuestras mentiras, ya había comentado algo de eso, pero hablemos de algo que, al menos a mi me sucede muy seguido.

¿Has notado que hay hombres que acostumbran tener siempre una posee, o actitud, de ser unos grandes conquistadores? ¿Has pensado que los hace comportarse de esa manera? Si, en buena medida estamos hablando de los hombres con las características de un Don Juan, ese personaje arquetípico que encanta mujeres y rompe normas sociales al conquistar a una monja y que tiene a muchas otras damas rendidas a sus pies. ¿Qué buscamos los hombres al comportarnos así? No voy a tratar a fondo el caso de un Don Juan, al menos no en esta ocasión, pero vamos a un nivel más sutil de este tipo de personalidad: el coqueteo.

A veces me parece que los hombres necesitamos tener una relación donde podamos coquetear, jugar con la idea de que puede existir algo más entre un hombre y una mujer, aunque no lo digamos directamente, buscamos la manera de mantener relaciones que nos den esa sensación de satisfacción ¿o sera de acompañamiento? Puede ser una amiga, alguna conocida o algo que dure solamente un momento y no necesariamente sucede cuando el hombre esta en una relación, basta con que exista esa necesidad de estar acompañado, si, posiblemente se trate de una cuestión de soledad algo que vaya más allá de la reafirmación machista. ¿Será que nos sentimos solos o inseguros?

Si contemplamos que siempre debemos de cumplir con ciertos roles, es natural que busquemos, de diferentes maneras, salir de ellos, encontrar la manera de salir de una rutina. Aunque en realidad todo lo anterior suena a un buen pretexto para justificar estas actitudes. He notado que, en ocasiones escribo más justificaciones que explicaciones, creo que es algo que acostumbramos hacer, hablar más de lo que nos lleva a comportarnos de un modo u otro. Quizás solo me faltaría decir que lo hago por ser hombre y ya. Esto es lo que luego me hace dejar de escribir en este espacio, siento que me justifico y que no propongo nada nuevo.

Entonces, ¿cómo hablar de lo que hago afuera de este espacio? El anonimato me ayuda pero no quiero ser un mártir, ni tampoco un extremista machista. Creo que solo necesito compartir lo que siento. He trasladado esa necesidad de mi vida cotidiana a este espacio virtual.

Cuando dejo de escribir veo los cambios en mi vida cotidiana, no coqueteo igual; o al menos no con la misma frecuencia. Cuando no escribo lo hago más, imagino más, me enamoro más, aunque lo expreso igual que siempre, muy poco.

Me gusta imaginar, pensar en lo que podría suceder con una persona, leer entre líneas lo que me puede estar diciendo, lo que puedo estar interpretando y lo que podría pasar. A diferencia de otros no busco realizar todo aquello que pasa por mi mente, eso ha traído problemas en más de una manera, a hombres que creen que lo que sienten y ven, es real.

En mi caso tengo claro quien lo produce, mi imaginación o mi necesidad de sentirme acompañado. No lo presumo, y eso es lo que he pensado que me hace diferente de otros hombres, au que al final parto de la misma base, la reafirmación. Saber, o creer, que puedo conquistar, o coquetear, con alguien que no es mi pareja, me llena de vida, me da una esperanza. Cómo si me permitiera saber que, no importa lo que pase, siempre habrá una oportunidad de salir adelante. 

Aunque se cual es la interpretación más tradicional, tener una puerta abierta, en caso de que se cierre otra. Tener una pareja por si termino con la que estoy. En mi caso no busco esto, solo quiero sentirme acompañado, a veces, solo por un momento.




10 feb 2012

Una verdadera equidad de género

Cuando comencé a escribir este blog, necesitaba ubicarme, ayudar a encontrar lo que significa ser hombre, lo que puedo hacer desde mi género para intentar encontrar una nueva manera de convivir entre hombres y mujeres, no se cuanto tiempo me tarde en hacerlo.

Siempre pensé que este tema era de poco interés para los hombres, ya sea porque consideran que no necesitan cambiar, porque no se han dado cuenta de que es necesario crear nuevas formas de convivencia o porque quizás lo están haciendo por su cuenta; el caso es que, a diferencia del feminismo no hemos logrado encontrar una teoría o movimiento que nos permita unirnos en búsqueda de un cambio. 

¿Este tema es de poco interés para el mundo feminista? No lo se.

El tema ayuda las nuevas relaciones, de inicio no fortalece el papel de la mujer, busca hacerlo equitativo junto al del hombre, creo que esto también ha hecho que exista un distanciamiento con los proyectos que se enfocan a las masculinidades.  El feminismo ha sido un gran aporte a nuestra sociedad, nos ha hecho proponer varios cambios que son y eran muy necesarios para nuestro crecimiento. No podemos avanzar como sociedad si no buscamos realmente una igualdad entre sus componentes, entre sus géneros. Las masculinidades han ayudado a darle un nuevo enfoque a la visión de los hombres sobe si mismos. Si me quedo con esto último se que viene de la mano un trato diferente con la mujer, pero ante esta idea de que se trabajan de manera diferente con ambos grupos.

¿Que un hombre hable sobre si mismo hace que sea un tema de poco interés para quienes trabajan con masculinidades? No lo se.

Estoy en busca de renovar mi manera de ser hombre, no se si lo he logrado o no, creo que a diferencia del feminismo, las masculinidades aún no logran ser un tema de interés social. Existen planes y proyectos de gobierno enfocado a las mujeres más no a los hombres. Trabajarlo así es como tratar un síntoma y no una la enfermedad.

Si solo impulsamos un género, entonces creamos lo contrario a lo que busquemos, deshacemos la equidad. OJO: ESTO NO LO HACE EL FEMINISMO LO HACEN LAS POLÍTICAS PÚBLICAS. Que provoca esto, que haya un favoritismo por cuestiones de género, igual al que ha existido en el machismo. La mejor manera de explicar esto es con la siguiente frase: "Divide y vencerás." No hay mejor manera de evitar un cambio en nuestra sociedad que poniendo a enfrentarse a hombres y mujeres. Así se van dando concesiones que representan un loro en la lucha feminista, pero, al no trabajarlas en conjunto con los hombres, logran crear una competencia de géneros.

Pasamos de la lucha feminista a la competencia de géneros ¿Cuando lograremos la verdadera equidad? Cuando lo trabajemos en pareja.

Toda la semana me preguntaba por qué muchos de los temas que hablaba en este blog terminaban en ste punto: las relaciones de pareja. Creo que esta es la respuesta.


Si no logramos transformar la guerra de géneros y logramos encaminarla a la búsqueda de nuevas relaciones seguiremos atrasando el cambio tan ansiado en nuestra sociedad, ese que nos lleve a construir una verdadera equidad de género.









3 feb 2012

Ira contenida

"Ámame cuando menos lo merezca porque es cuando más lo necesito"

Dicen que es un proverbio chino aunque lo he escuchado aplicarse en más de una ocasión en casos de hombres que al tratan a sus parejas. ¿Pensarán en el quienes sufren violencia en el hogar?

Varios libros, artículos y, seguramente, estudios que hablan de la equidad de género se han dedicado a saber como prevenir la violencia intra-familiar, incluso hay organizaciones que se encargan de trabajar con los hombres para ayudarles en a cambiar estas situaciones, como Coriac y Hombres Por la equidad.

¿Qué hace que nos comportemos de esta manera?

Llevamos muchos siglos con una imposición de nuestro comportamiento, de nuestras costumbres y de todo lo que nos dice lo que debemos ser y hacer. Si en efecto, esto ha hecho que los hombres vivamos reprimidos por la falta de expresión de nuestro comportamiento podría ser una de las causas que hacen que los hombres podamos comportarnos de manera agresiva. Si, influyen muchos más factores, pero esto nos puede ayudar a comenzar a tomar conciencia de estas situaciones e intentan cambiarlas. 

De la manera en que lo expreso es algo muy amplio y general, tratemos de aterrizarlo a cosas más prácticas y un ejemplo más sencillo.

Una pareja que vivió un hermosa relación de noviazgo, se casaron y después de un tiempo comenzó a cambiar, su comportamiento era más agresivo, se volvió violento, nunca la lastimo físicamente pero el lenguaje y las acciones reflejaban mucha agresividad. Durante todo su noviazgo él oculto esta agresividad, ¿problemas de la infancia?, es probable, el asunto es que, inconscientemente, el ha guardado esa agresividad hacía la mujer. Por eso todo le molesta, le es fácil explotar y responder agresivamente ante su pareja. Ella no lo recuerda así, sabe que podría haber mejores momentos y, como siempre se disculpa cariñosamente, además de que se le nota la culpa por el comportamiento, quiere creer que esta situación va a cambiar, eso desea.

Los hombres tenemos un lenguaje con el que es muy fácil denigrar, ofender e insultar sutilmente a las mujeres, además del que nos hace distanciarnos de ella porque no la comprendemos, porque o es como nosotros. Cualquiera de estos lenguajes nos crea un comportamiento que, en algún momento nos hará expresar esa violencia a nuestro pareja.

Tenemos mucha agresividad contenida en nosotros y es la que nos hace expresar frases como "no sabía lo que decía" o "no medí mis palabras" o, la más común, "te prometo que no lo vuelvo a hacer". Si a veces es necesario tomar conciencia de lo que hacemos a nuestra pareja pero, el tomar consciencia de ello, no implica que sepamos como resolverlo. Podemos vivir buscando evitar como explotar y no por ello cambiar la situación que nos produce esa sensación de incomodidad y molestia ante cosas que hace o dice nuestra pareja. 

Necesitamos conocer el origen de estas situaciones para intentar cambiarlas pero necesitamos tomar acciones si, de verdad, queremos que ello no se repita.

La ira siempre se puede controlar, guardar y contener y si no se identifica puede manifestarse. siempre con muy malos resultados. Para trabajarla hay que conocer su origen y crear nuevas conductas que nos permitan modificar su expresión. Si no se hacen ambas cosas no habrá ninguna modificación.

La conciencia no se alcanza con el conocimiento si este no sirve apara aplicar un cambio en nosotros.

¿Te gustaría saber como cambiar estas situación? No dudes en escribirme